Categorías
desarrollo personal emprendimiento

¿Eres emprendedor? Por qué tu principal obstáculo puedes ser tú mismo

¿Tu principal enemigo eres tú mismo?

Me dí cuenta de que mi principal enemigo era yo mismo cuando ya era tarde para salvar mi primer negocio, una cadena de restaurantes "fast & natural" (llegamos a tener 3 restaurantes operativos en la Comunidad de Madrid en tan sólo 3 años).  Puedes leer sobre ello aquí sin necesidad de comprarte "Game Over", el libro sobre mi experiencia que publiqué hace un par de años.

Game over

Podría echarle la culpa de aquello a la crisis, a un equipo desmotivado o a unos clientes que no llegaron a entender nuestra propuesta.  Pero me estaría engañando a mí mismo.  El principal causante del cierre de la empresa fui yo.  Y no por falta de empeño, sino por exceso de celo…

Después de una década de investigación, Noam Wasserman de la Universidad de Harvard llegó a la conclusión de que dos tercios de las nuevas empresas no fracasan por problemas exógenos a la empresa, ni por ausencia de clientes o de liquidez en un momento puntual.  Lo hacen como consecuencia de problemas personales que terminan por ahogar a sus fundadores.

¿Nos marcamos retos inalcanzables..?

Las evidencias apuntan a que estos problemas casi siempre se desencadenan como consecuencia de ponértelo imposible, de una de estas formas:

  • Marcándote retos muy superiores a tus capacidades.  En mi caso, no sabía lo suficiente sobre hostelería ni tenía los suficientes recursos para arrancar mi actividad rodeado de profesionales que sí supiesen.  La ambición, en mi caso, se convirtió en un caballo desbocado al que no supe detener a tiempo.
  • O bien marcándote retos alcanzables, pero completamente alejados de aquella actividad que adoras ejercer (que normalmente coincide con aquello en lo que eres bueno, porque al gustarte le dedicas un montón de tiempo hasta que te conviertes en un experto).

Da lo mismo: ambos caminos conducen a la infelicidad, a marcarte un rumbo errático, un destino absolutamente imposible de alcanzar.

Jamás te alejes mucho de lo que querías ser de mayor

Fíjate en este gráfico que preparé hace tiempo con la ayuda de mi hija Alejandra: 

Grafico alex

Cuando somos niños nos imaginamos que en el futuro nos dedicaremos a algo relacionado con cierta vocación que vamos desarrollando (mi padre siempre quiso ser marino, mi hermano militar y yo escritor – he de decir que de momento soy el único que no ha conseguido vivir exclusivamente de su actividad preferida 🙁

Ciertas tribus nativas de América creen que cada individuo nace con un talento innato que desarrolla durante su vida y del que puede beneficiarse toda su tribu.  Este asunto puede parecerte esotérico, pero a poco que lo pensemos, realmente cobra su sentido.  Si te dedicas a aquello para lo que tienes talento, es más fácil que llegues a buen puerto.

Como apunta el Dr Mario Alonso Puig (con el que tendré la oportunidad de reencontrarme una vez más en un evento que estamos preparando), primero es siempre SER, luego viene HACER (producir, como consecuencia de estar bien) y sólo finalmente TENER (conseguir un bienestar y un estátus como consecuencia de lo que eres capaz de hacer). El problema en los tiempos que vivimos es que lo queremos hacer todo tan rápido que sólo el TENER parece tener sentido y merecer nuestra atención.

Pero pasa el tiempo y esas urgencias que todos conocemos (la hipoteca, los coches, el cole al que debo enviar a mis niños) nos hacen desviarnos de nuestro camino.  Ciertas desviaciones son aceptables, pero cuando realmente aquello a lo que nos dedicamos entra en conflicto con nuestros sueños y expectativas, tenemos un problema.

Un problema bien gordo…

Mi problema fue darme cuenta de ello cuando ya había invertido un pastizal en mi negocio.  Mi gran suerte es que todo ese pastizal que perdí ha sido como un máster en mi mismo y en mi futuro: ahora creo conocer mejor cuáles son mis limitaciones y en qué debo invertir mi tiempo para disfrutar de lo que hago y (insisto, frecuentemente es lo mismo) hacer lo posible por vivir de ello.

Saludos a todos.

 
Categorías
desarrollo personal gestión del tiempo

GESTIONA MEJOR TUS RELACIONES DE TRABAJO Y AHORRA 2 HORAS AL DIA

DEMASIADAS COSAS QUE HACER?

Comparto con vosotros lo que hago en el día a día:

  • Lo que más tiempo me quita: mi empresa Pop Up Música: todavía somos una start up y requiere mucha atención todos los días.
  • Además imparto formación en la Escuela de Publicidad, en ESDEN, en Madrid School of Marketing y en empresas privadas.
  • Y curso mi doctorado en Branded Content.  Entregué mi tesis el pasado mes de Enero y voy a defenderla a finales de Mayo en la URJC.
  • De vez en cuando colaboro como speaker para la promoción de mis libros “Game Over” y “Big brother is dead”.
  • Y estoy trabajando (de momento es solo un guión preliminar) sobre mi tercer libro.
  • Escribo tres veces a la semana en este blog.
  • E intento responder a diario a los mensajes de mis redes sociales.
  • Procuro hacer caso a Alejandra y para Carmen, que son pequeñas y nunca volverán a serlo.  En esto debo mejorar.
  • Y entrenar para volver algún día a bajar de 3 horas en maratón.

… Y NO SOY PARA NADA UNA PERSONA ORGANIZADA

  • No consigo vaciar mi buzón de entrada de email aunque luche por ello.
  • No miro el buzón del portal más de una vez cada quince días.
  • No reservo mis vacaciones hasta que me quedan 15 días. 
  • No reviso mi cuenta bancaria salvo que tenga que hacer una transferencia.
  • Siempre tengo 3 ó 4 libros a medio leer en mi mesita de noche.
  • No tengo un archivo organizado de documentación, sino cajas, carpetas y subcarpetas por proyectos donde todo entra más o menos al tuntún.
  • No recuerdo los cumpleaños.
  • Y podría seguir…

Sin embargo creo que consigo sacar una considerable cantidad de trabajo gracias a 5 prácticas que os explico a continuación y que no tienen nada que ver conmigo sino con los demás (y mi escasa tolerancia a que los demás decidan por mí cuál es el mejor uso de mi tiempo).

Es decir, que TÚ seas más eficaz depende en parte de lo que seas capaz de conseguir en tu relación diaria con los DEMÁS.

Trabajo equipo
1. APRENDE A DECIR NO

No hay nada más dañino para tu agenda y para tu imagen ante los demás que cargarte de responsabilidades que no puedas cumplir.  Si sabes que no vas a poder hacer algo o que ese algo cae fuera de tus cometidos o tus capacidades, dí NO.

Es lo mejor para ti y para los demás: hay una diferencia crucial entre gestionar y simplemente coleccionar listas de tareas pendientes.

Intenta quitar una micro-tarea diaria que no tengas por qué hacer y quizá ganes 10 minutos de tiempo.

2. APRENDE A DECIR “VETE AL GRANO”

Los humanos (y más los humanos que viven en España), tendemos a andarnos por las ramas y decorar nuestro discurso de forma exasperante.   Bien sea para vender una moto, bien sea para justificar un error: los preámbulos excesivos solo harán que llegues a casa más tarde por la noche.

Conozco gente que a una media de 20 llamadas telefónicas diarias multiplicado por unos 5 minutos de cháchara irrelevante en cada una, pierde diariamente 100 minutos de su tiempo.  Naturalmente, luego se quejan de que no tienen tiempo y no llegan a nada.

Si el que se enrolla es el otro, corta por lo sano.   Si tú eres borde, él es un pesado.  ¿Qué es peor?  No tengas miedo a cortar.

Prueba a eliminar los rodeos innecesarios: 5 minutos por diez conversaciones diarias = 100 minutos.

3. ABANDONA/FINALIZA UNA REUNION CUANDO HAYAS ALCANZADO LOS OBJETIVOS PARA LOS QUE LA CONVOCASTE

Para ello, jamás comiences una reunión  sin unos objetivos claros de lo que necesitas y cuánto tiempo máximo es razonable dedicarle.  Cuándo hayas logrado lo que querías, discúlpate, levántate y vete. 

Así mostrarás a los demás que no te interesa alargar innecesariamente las conversaciones.  Y quizá la próxima reunión dure menos.

Zanjar una reunión en el momento oportuno te puede otorgar otros 10/20 minutos de tiempo extra cada día.

4. APRENDE A DELEGAR

Delegar no es lo mismo que escaquearse y pasarle marrones a otro:  requiere atención y trabajo. 

Como saber delegar es una tarea adicional, mucha gente no lo hace: ¿para que enseñarle a otro lo que voy a hacer yo más deprisa?   Tengo una buena respuesta para eso: para que ese otro termine haciéndolo mucho mejor que tú y tu empresa/departamento no dependa solo de ti.  Lo cual es siempre el peor escenario posible.

Obviamente, para delegar debes soltar tú las riendas e inculcar al otro la idea de que el poder de decisión es suyo, pero la responsabilidad también.  El que decide, tiene derecho a equivocarse… siempre que no se equivoque el 100% de las veces.

El volumen de tiempo que puedes llegar a ganar delegando bien es tan grande que ni siquiera me atrevo a cuantificarlo.

5. CUANDO TE HAGAN ESPERAR MAS DE 10 MINUTOS, VETE

Hay dos tipos de personas:   los que esperan y los que hacen esperar.  En ningún sitio está escrito que pirarse después de esperar a alguien media hora será una descortesía.  Una descortesía es hacerte esperar media hora. Prueba a pirarte cuando te haga esperar un cliente, yo lo he hecho y lejos de perder al cliente, he conseguido que la siguiente vez me tratase con más respeto.

¿ERES MÁS DE ATACAR, PASAR DE TODO, O SIMPLEMENTE DECIR LO QUE PIENSAS?

En el fondo los 5 consejos están relacionados con saber adoptar el enfoque correcto entre las 3 posturas arquetípicas de las que nos habla la psicología conductual:

  • El agresivo:  un desgaste permanente.   Para el que agrede y para el que es agredido. Lo digo por experiencia.
  • El inhibido: confundir ser majete con ser eficaz es una trampa bestial en la que cae muchísimas personas con las que he trabajado.  Eluden el conflicto para sumirse en un mar de naderías que les arrastra a ellos y a los demás.
  • El asertivo:  por qué no decir abiertamente lo que sientes y lo que necesitas sin ofender a nadie pero sin andarte con paños calientes.  Esta es la ruta que te recomiendo, y por la que intento discurrir todos los días.

Sin lograrlo siempre…

YA LO TIENES: TOMA LAS RIENDAS TÚ PARA QUE NO LAS TOMEN OTROS POR TI 

No tengas ninguna duda que si pones en práctica todo lo anterior (pero de verdad) puedes terminar ahorrando más de 2 horas diarias de trabajo.

Por cierto, yo no utilizaría esas dos horas para trabajar más sino para estar con los tuyos o para hacer otras actividades que a la larga incidirán positivamente sobre tu creatividad (lee, juega, visita, curiosea…).

Saludos a todos.